El finalmente despertó
¡De repente, ocurrió! El aliento de Bryan se quedó atrapado en su garganta mientras luchaba por comprender la realidad que se desenvolvía ante él. Diez largos años habían pasado y ahora, los ojos de Thomas se abrieron lentamente, despertando de su sueño. Abrumados por las emociones, Bryan y sus padres no pudieron contener las lágrimas de alegría. Mientras los minutos pasaban lentamente, los susurros apagados del personal médico confirmaron la condición estable de Thomas, instándolo a finalmente encontrar consuelo en el descanso.
Lo primero que hizo él
Thomas luchaba por mantener sus párpados pesados de cerrarse; el agotamiento amenazaba con dominarlo. Aún así, perseveró. Y allí estaban: su hermano y sus padres, parados frente a él. Un destello de sonrisa bailaba en sus labios mientras se abrazaban, sus ojos entrelazados en una conexión sin palabras.