Hay movimiento
Él levantó la vista hacia el rostro de Thomas, observando el sutil movimiento de sus párpados. Un destello de anticipación bailaba en sus temblorosas pestañas. Era evidente que algo importante estaba a punto de suceder. Afortunadamente, la enfermera, que aún no había salido de la habitación, también se percató de ello. Rápidamente, solicitó ayuda y en cuestión de momentos, la sala fue invadida por un enjambre de enfermeras y médicos.
Hay movimiento
Esperando a que abra los ojos
Laación estaba consumida por el caos. Los miembros del personal se apresuraban, sus acciones eran un borrón. Las máquinas pitaban insistente, añadiendo a la cacofonía. Mientras tanto, las enfermeras se apresuraban, dando órdenes y atendiendo tareas. En medio de este torbellino, la mirada de Bryan permanecía fija en su hermano, las lágrimas le afloraban en los ojos. Con la respiración contenida, anhelaba ese elusivo momento en que su hermano finalmente despertaría.
Esperando a que abra los ojos
